Balance de la participación en los Consejos de Cuenca de los ríos Negro y Nare: trayectorias y desafíos

La cuenca del río Negro

El río Negro es la fuente principal del río Nare, nace en el municipio de El Retiro y discurre también por los municipios de Rionegro, Marinilla, San Vicente y El Peñol, siendo, además, el río más importante del Altiplano conocido como Valle de San Nicolás. Es también el río urbano de las ciudades de Rionegro y Marinilla, donde en la primera es un eje estructurante de la dinámica arquitectónica. El río Negro tributa sus aguas al cuerpo lacustre Peñol-Guatapé, donde luego de este, surge el río Nare propiamente dicho.

Luego del embalse Peñol-Guatapé, el Nare corre por los municipios de Guatapé, Concepción, Alejandría, Santo Domingo, San Roque, San Rafael, San Carlos, Caracolí, Puerto Berrío y Puerto Nare, recogiendo numerosas fuentes hídricas de gran importancia como los ríos Pereira, Concepción, Samaná Norte, Nus y San Lorenzo, lo que lo convierte en una de las cuencas más extensas y caudalosas del departamento. El río Samaná Norte es su principal afluente, el cual a su vez recoge a los ríos Verde de los Montes, Verde de los Henaos, Santo Domingo, Calderas, Dormilón y Guatapé, este último río también recoge a los ríos San Carlos y Bizcocho.

Evidentemente ha sido esta gran riqueza hídrica la que ha impulsado el desarrollo hidroeléctrico del Oriente de Antioquia, siendo esta la zona de mayor producción energética del país. En el curso de esta cuenca se construyó Jaguas – San Lorenzo, un embalse que alimenta una de las hidroeléctricas de mayor capacidad para generar energía en Antioquia. Finalmente, el río desemboca, a la altura de Puerto Nare, al Río Magdalena siendo uno de sus principales afluentes.

El Consejo de Cuenca

En Colombia, todas las cuencas hidrográficas deben tener un Plan de Ordenación y Planificación que se conoce como Pomcas. Según la Política Nacional para la Gestión del Recurso Hídrico dichos planes se definen en una instancia de participación ciudadana denominada Consejo de Cuenca.

Entre los actores que se destacan en esta instancia de participación están comunidades indígenas, los afro, los campesinos, el sector académico, las agremiaciones del sector productivo, las empresas prestadoras de servicios y acueductos, ONG, gobernaciones y alcaldías, entre otros, quienes construyen colectivamente los lineamientos para que todos los sectores que tienen incidencia estén representados en la ordenación y en la toma de decisiones del Consejo. Como su nombre lo indica, aconsejan sobre lo que debe suceder en la cuenca.

Ad portas de iniciar un nuevo proceso de elección de Consejos de Cuenca en la jurisdicción de la Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los ríos Negro y Nare, el día 25 de junio de 2020 se llevó a cabo el Encuentro Virtual de Consejeros/as de Cuenca, con el objetivo de evaluar los logros y dificultades en la gestión de los consejos durante el periodo 2016 – 2019, y obtener así una serie de recomendaciones para los nuevos consejos a elegir en el periodo 2021-2024.

El encuentro contó con la participación de varios funcionarios de Cornare, la participación como invitado especial de Corpocaldas, el Consejo de Cuenca del Río Negro, el Consejo de Cuenca del Río Nare, el Consejo de Cuenca Samaná Norte, el Consejo de Cuenca Samaná Sur, el Consejo de Cuenca Río Cocorná y directos al Magdalena y el Consejo de Cuenca Samaná Sur.

Durante este encuentro y gracias a los aportes de los asistentes se identificaron algunos de los principales logros, dificultades y recomendaciones para los siguientes integrantes de los Consejos de Cuenca.

¿Cuáles fueron los principales logros?

Se valoró como un muy importante resultado la realización del diagnóstico inicial de la cuenca, el cual fue la base para la formulación de los Pomcas, en especial por su la amplia participación de diferentes actores e instituciones. También se valoró como un gran logro la formulación de los Pomcas y el acompañamiento técnico que recibió el Consejo a lo largo de este proceso.

También un resultado muy bien valorado fue el tiempo y disposición para las actividades dedicaron los consejeros y las comunidades, incluso para movilizarse a otros territorios y durante varios días. En especial se destacó la participación activa de los alcaldes y su capacidad de movilizar personas y recursos a los objetivos del Pomca.

Finalmente se valoró muy bien la comunicación y el intercambio generado con otros actores que están en las áreas de incidencia de las cuencas que no tienen representación formal en el consejo.

¿Cuáles fueron las dificultades?

En general las dificultades identificadas por los consejeros durante el periodo, estuvieron enmarcadas, en primer lugar, por la poca incidencia de los Consejos en la etapa de ejecución del Pomca y por lo tanto en su rol que considera limitado a ser consultor. La participación fue otro de los temas de preocupación, en primer lugar de los consejeros por las grandes distancias entre los municipios que conforman cada consejo y, de otro lado, de los alcaldes pues además presidían el consejo y presentaban frecuentemente dificultades para participar de las reuniones.

De otro lado la pandemia y el distanciamiento social se sumaron a las dificultades porque para muchas personas y consejeros no era fácil usar y tener acceso a los canales digitales que se implementaron como alternativa de reunión. Finalmente, se calificó como una gran dificultad las condiciones económicas de los consejeros, lo que no les permitía dedicar tiempo a las actividades del consejo de cuenca.

Las recomendaciones

Las recomendaciones de quienes finalizan su periodo al frente de los Consejos de Cuenca podemos agruparlos en aspectos técnicos y logísticos: relacionados con mejorar la comunicación y difusión de las convocatorias y las condiciones para la conexión a los canales digitales de los consejeros. En esta misma línea se recomienda destinar mayores recursos económicos para financiar las actividades y encuentros de los consejeros, quienes no cuentan con recursos propios. La articulación: se recomienda generar espacios de intercambio entre el consejo y las organizaciones que participan, así como la articulación del Consejo de Cuenca con otros espacios e instancias de tipo ambiental de las comunidades, como las mesas ambientales.

Teniendo presente que un Pomca es responsabilidad de todos los actores que hacen presencia en el territorio, entre ellos los alcaldes, gobernadores y la comunidad, la vinculación de las autoridades territoriales es indispensable. También, la realización de alianzas entre las instituciones es fundamental para poder concretar proyectos tendientes a la conservación y recuperación de estas grandes cuencas, determinantes para la vida en los territorios.

Y si bien el Pomca tiene una estrategia de participación que va desde la fase de aprestamiento hasta la de formulación, es necesario planear y coordinar una estrategia de participación entre la CAR y los Consejos de Cuenca para la fase de implementación y difusión del Pomca. Así como planes de trabajo y un cronograma. Esto facilita que se pueda mantener la dinámica de los Consejos y los recorridos por los diferentes municipios que conforman la cuenca, de manera que se promuevan ejercicios en torno al ordenamiento territorial.

En términos generales, las posibilidades de que los Consejos de Cuenca incidan en la toma de decisiones depende de los escenarios de trabajo y relacionamiento que se abran con las autoridades ambientales. Al respecto, Cornare podría posicionar más su rol si, por ejemplo, permeara su gestión con los aportes y consensos de los Consejos.

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Bibliografía

Relatoría reunión virtual balance gestión consejos de cuenca, junio 25 de 2020.